viernes, 2 de noviembre de 2012

Memorias de un caballo andaluz de Távora llega a Sevilla



El espectáculo teatral Memorias de un caballo andaluz de Salvador Távora se estrenó el pasado 25 de octubre en el teatro que lleva el mismo nombre del director teatral. Barcelona acogió el primer estreno en los escenarios desde el 11 de septiembre hasta el 24 del mismo mes. Todo empezó a tomar forma en julio, cuando empezaron los ensayos, tal y como afirma una de las protagonistas, Rocío Suárez, que representa el papel de bailaora toro-torera: "En el mes de julio nos llevamos veinte días ensayando y en septiembre sólo una semana para irnos a Barcelona".


Imagen del exterior del teatro antes de que diera comienzo el espectáculo.

Rocío Suárez tiene un papel destacado en el nuevo espectáculo de Távora, en ese sueño flamenco-taurino. "Salvador ha cogido los elementos de la plaza de toros, no porque esté en contra o a favor de eso, sino para expresar lo que está viviendo la sociedad ahora y lo que estamos sintiendo", afirma esta sevillana de 23 años, quien ya ha trabajado a las órdenes de Salvador Távora en más de una ocasión, "terminé la carrera de danza con 18 años e ingresé, aquí, en esta compañía en la obra de Las Bacantes, como segunda bailaora. Después hice Carmen, Flamenco para Traviata, Sustituciones de Andalucía y ahora ésta, de principal". 

Eran las siete y cuarto de la tarde cuando los actores hicieron acto de presencia. El escenario estaba dispuesto a modo de plaza de toros, una muestra más de la afición de Távora por todo lo que rodea al mundo taurino. La iluminación era tenue. Entre el público, que completaba el aforo del teatro, había algún que otro niño, puesto que era día festivo, 1 de noviembre. Y, quizás, también, porque en el espectáculo intervenía un jinete, Jaime de la Puerta, y su caballo, Cascanueces. Así un niño, de rubios cabellos, de unos cuatro años, emitía gruñidos de asombro cada vez que el caballo aparecía.

La música, la danza, el cante flamenco, las interpretaciones, la intervención del caballo se combinaban, en ocasiones, con los aplausos del público. Esa combinación de elementos en las tablas es muy recurrente por parte de Távora  en sus obras, "cuando yo estoy creando estas cosas, todo lo que me da escalofríos lo voy dejando. Y pienso que después ese escalofrío es transmisible". 

El espectáculo finaliza con la muerte del toro, Rocío Suárez. Las luces del escenario se apagan, se encienden los focos de las butacas, el público aplaude. Los actores salen a escena de nuevo junto al director de la obra, Salvador Távora. La obra seguirá representándose hasta el próximo 30 de noviembre, en doce únicas representaciones.

                                                   Vídeo promocional de la obra:

Redacción: María Regla Agüera Torres.
Fotografía: María Regla Agüera Torres.
Vídeo: extraído de Youtube (canal Clubtr3sc).
Fuentes: María Regla Agüera Torres, Rocío Suárez (bailaora, intérprete de la compañía La Cuadra de Sevilla), Salvador Távora (director del espectáculo Memorias de un caballo andaluz), Sandra Valdés Sánchez.

Locución crónica Memorias de un caballo andaluz

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